miércoles, 17 de abril de 2013

¿Para qué sirve la Universidad?


Tras llevar prácticamente dos años estudiando en la Universidad, me planteo una duda, la cual voy a reflexionar a continuación y voy a compartir con vosotros, esperando que me aportéis vuestras ideas y experiencias para poder poner en común todas nuestras opiniones y llegar a una conclusión.

Sobreentendemos que estar unos cuantos años estudiando en la Universidad tiene algún fin y sirve para algo a parte de obtener un título que nos garantice nuestro esfuerzo, ¿no?

Cuando acabamos la Educación Secundaria Obligatoria y el Bachillerato, nos dan la opción de elegir nuestro camino, ya sea a través de la Universidad, de un Grado Superior u otras optativas. Creo que elijamos lo que elijamos es porque nos gusta y queremos ejercer de ello, ¿no es así? En mi caso, os hablo de la Universidad, y es que la mayoría de nosotros estudiamos lo que nos gusta, pero, entonces ¿por qué pasamos más horas en el bar que en la clase? ¿Por qué utilizamos más fotocopias ajenas que apuntes propios? ¿Por qué utilizamos más la memorización que la comprensión? Todos estos métodos que utilizamos, que a simple vista parecen realmente cómodos y aburridos, nos hace ver a la Universidad desde otro punto de vista, llegando a confundirla con una carrera de obstáculos.  Pero debemos ver el lado bueno de las cosas y sacar la mayor utilidad al sistema que nos está formando para poder ser uno de los mejores innovadores en el futuro y aprender cosas nuevas cada día pues nos condicionamos hoy para ser algo mañana. Y para ello hay que dedicar esfuerzo.

La Universidad no es sólo una fiesta detrás de otra, ni aprovechar un viaje para desaparecer una semana, o subrayar libros que no son tuyos… La Universidad nos enseña a ser personas para saber estar a la altura de los tiempos, tanto en nuestra futura profesión como en la vida personal.

Estoy de acuerdo con lo que defiende Francisco Esteban Bara (Profesor titular del Dto. de CC. de la Educación, F. de Humanidades de la Universidad Internacional de Cataluña): “El estudiante que practica el hábito de la puntualidad se dará cuenta de la importancia que tiene respetar al otro, si practica el hábito del silencio comprenderá lo provechoso que resulta pensar de vez en cuando, si sabe estar en la biblioteca admirará el legado de otros, degustará el sentido de lo comunitario, y ni por asomo se le ocurrirá embadurnar los libros con fluorescente, si practica el hábito de la escucha verá como se reduce el número de veces que mete la pata porque aprenderá que antes de opinar uno debe conocer, si trabaja con compañeros, que es diferente a repartirse el trabajo, saboreará el valor de la amistad, de esa que va más allá de los años universitarios. En definitiva, sabrá que de poco sirve tener un título si no se dan muestras de haber vivido la universidad“.

En definitiva, por lo que a mí respecta, la etapa universitaria es un período de oportunidades enriquecedoras, el cual crea entornos de aprendizaje a nivel personal y profesional, pero para ello deben ser bien aprovechadas. Si tenéis la oportunidad de ir a la Universidad, os recomiendo que lo hagáis, pero, eso sí, ¡debéis ser conscientes de que estáis ante una oportunidad única! ¡Sacarle el máximo partido! Si no, simplemente estaréis dejando pasar el tiempo.

            Os adjunto un vídeo de una alumna Universitaria, la cual hace de la Universidad una visión aburrida y en modo “graciosa”. ¡Luchemos por cambiar dicha perspectiva! ¡Luchemos por la sociedad del siglo XXI!